Puede aplicarse en temperaturas de -28 hasta +60 grados
Hace innecesario el uso de pegamentos líquidos y de zurcidos
Se estira y se encoge volviendo a su estado original
Al estirársele no se despega ni se rompe
Frena los desgarros
Puede cortársele a la medida necesaria
Modo de uso:
- Limpie y desengrase el material alrededor del desperfecto utilizando el paño con alcohol. Asegúrese de que la superficie esté completamente seca.
- Corte un parche de Tear-Aid del tamaño y forma adecuados. Para obtener un resultado óptimo, procure que el parche tenga al menos 2,5 cm de reborde por cada lado, por los que se pueda pegar.
- Lo mejor es cortar las esquinas redondeadas.
- Quite con cuidado el papel de protección del parche hasta desproteger un trozo de más o menos 1 centímetro. Lo mejor para ello es estirar el parche hasta que el papel de protección se desgarre.
- Ponga los dos lados del roto uno junto al otro.
- Aplique el trozo desprotegido de Tear-Aid sobre el roto. Retire el resto del papel y, al mismo tiempo, extienda el resto del parche sobre el material a reparar.
- Presione firmemente otra vez, empezando desde el centro.
Recomendamos aplicar calor sobre el parche, una vez pegado, para activar el pegamento y mejorar la adherencia.